Esto no se podía retrasar más y el otro día decidimos hacerlo, Alberto quedó conmigo en Berceo donde sus suegros tienen un bonito terreno y un sitio estupendo para celebrar “eventos” como este.
Llegué sobre las 12 de la mañana, Alberto ya me esperaba allí, sembrando césped o algo así, me presentó a su padre setero, su suegro, un amigo medio loco y a un primo de su suegro, muy hábil con las manos y extraordinario mecánico por lo que pude comprobar más adelante.
El menú no pudo ser más acertado para la época en la que estamos y consistía en:
1.- Caracoles con arroz y setas de perro-chico,(sé que se escribe txico pero no se me pone los cojones).
2.-Puerros cocidos, que estaban extraordinarios
3.-Chuletas de buey, que no se a través de quien me contó que las había conseguido pero joder con las chuletas…
La mesa estupenda y sobre todo la compañía, una panzada más, Gracias Alberto.
joder Chisco, ¡como sufres, tío!, me lo han contado esta mediodía en la Laurel y no han exagerado na de ná. Nos vas a tener que contar de donde han sacado las chuletas de vaca. Lo que véo es que están asadas con sarmientos y que son gordas, gordas. Ya estás preparando carrasca de castilla para las próximas.
ResponderEliminarTe hice c aso hace unos días y me premié en Lerma con un lechazo de antología, en uno de de esos sitios que dices que se puede ir de vez en cuando .